jueves, 26 de mayo de 2011

Raúl Castells: "Que Schoklender, Bonafini y De Vido sean procesados"


Desde hace tiempo el Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD) viene denunciando el accionar de la Fundación Madres de Plaza de Mayo, particularmente la de Sergio Schoklender y Hebe de Bonafini, principales precursores de "Sueños Compartidos". Esta organización es financiada por el Gobierno kirchnerista y ha recibido la licitación para la construcción de miles de viviendas, las cuales denunciamos en su momento que sus paredes eran rellenas con telgopor, y principalmente informamos que por ejemplo nuestra cooperativa de construcción en Chaco puede hacer una vivienda por 40 mil pesos, mientras que los Schoklender y Bonafini las cobrabran 140 mil.

En cuanto a los hospitales que construyeron se hizo uno en Tartagal, Salta, que cuando fue noticia la muerte de niños en la provincia por desnutrición, este hospital nuevo no contaba con personal médico, ni equipamiento para la atención. Sin olvidar tampoco el trato discriminatorio que estas personas tuvieron hacia nuestros hermanos bolivianos cuando estuvimos haciendo huelga de hambre en plaza de mayo el año pasado.

Ahora se pelean haber quién se quedó o se queda con la plata que en gran parte le sacaron al Estado. La noticia no deberia ser la pelea actual entre ellos, deberia ser que AMBOS devuelvan lo que robaron. Y concretamente que sean procesados junto a Julio De Vido por malversación de fondos públicos.

Raúl Castells

1 comentario:

Fans Club de Ariel Corbat dijo...

DOLOR DE MADRE -cuento breve de una tragedia-


Al fondo del último recoveco, en las profundidades de su conciencia, la mujer fue arrinconando apretadamente el mayor de sus rencores. Durante mucho tiempo pudo esconderlo de todos. Salvo, claro, de sí misma. En la soledad más absoluta nunca derramaba lágrimas, por ellos solamente insultos. Su sombra era el mudo testigo del modo en que encorvaba la espalda para sacar desde muy hondo todas y cada una de las palabrotas. Y a veces ni siquiera palabras, secos e impiadosos sonidos guturales lacerando el agrio repudio de la sangre. El dolor fue sincero, ¿cómo no serlo?, la mentira anidaba en la razón de tan grande aflicción. Se aferró al pañuelo como un blanco de amnesia, para olvidar todas las manchas, aquellos mocos que ella misma les sonaba. Y lo lavaba para que se viera más limpio. Pero la traición... ¿de qué forma perdonarles la traición? Porque no fue sólo que se alzaron contra la Patria al ensangrentar la tierra queriendo arriar la bandera que los vio nacer. Otras madres de hijos igualmente ganados por la misma causa del odio se dejaron caer en la vergüenza al entender que intentando borrar la historia del país y arrasar sus símbolos, tradiciones y libertades lo que en verdad querían era matar a sus padres. Al fin de cuentas eso es la Patria, la tierra de los padres. Ella se negó a verlo, pero lo vio antes de cerrar los ojos. Esos hijos escupieron en la cara de sus progenitores que la sociedad que les legaban era mierda, tan mierda que merecía ser aplastada bajo la opresión de un trapo rojo. Todo se debía destruir, las leyes, las costumbres y hasta los afectos para dar paso a un hombre nuevo. Un hombre nuevo que no tendría nada de hombre, pero sí mucho de bestia y autómata.

No pudo soportar sentir semejante vergüenza por haber engendrado esos hijos. ¡Asesinos!, gritó. Y hubo quienes mal creyeron que insultaba a los matadores de su prole. Nunca entendieron el profundo dolor de madre traicionada. El deseo de venganza atronaba día y noche entre sus sienes. A toda hora vociferaba la furia que le arremolinaba el ánimo.

Entonces cierto día conoció a un convicto parricida, y al fin halló el modo de consumar su venganza.

- Hijo, hijo mío -le dijo.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha
http://www.plumaderecha.blogspot.com
Estado Libre Asociado de Vicente López

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