Suicidio masivo

Suicidios masivos de capitalistas

La crisis del capitalismo hizo su aparición en el 2007-2008 cuando cayó el consumo de la población mundial. El poder adquisitivo de la gente se vino abajo a causa del desempleo masivo que produjo la revolución tecnológica. Esta situación fue prevista por el MIJD con una anticipación de ocho años. ( “Las Causas de la Crisis Económica Mundial”) escrito en el 2001.

La receta que extienden los “expertos” economista a nivel mundial y que hacen suyo los gobiernos de las potencias imperialistas y la aplican en todo el planeta, es el ajuste. Significa, reducir los gastos de los estados, produciendo despidos masivos de empleados públicos y privados, reducciones salariales, eliminación de los subsidios a los desocupados, a los discapacitados y a la niñez. Aumento de la edad jubilatoria, eliminación de los planes de viviendas y otras construcciones. En fin una mayor caída del consumo. Dicho de otra manera, una terrible profundización de la crisis. Un verdadero suicidio del sistema capitalista.

Como si de repente se despertaran, ahora crecen los sectores del imperialismo que empiezan a ver que todo el sistema puede ir al abismo. Según el The NewYork Times, “Los países ricos están haciendo un peligroso experimento” “Casi todo el mundo está eliminando los programas de estímulo al consumo a la vez” Y según Adam Posen, experto en crisis financiera del Banco de Inglaterra, “El mundo puede estar cometiendo un error y puede suceder que las cosas empeoren en lugar de mejorar”.

La otra cara de ésta moneda, es el creciente descontento de los trabajadores y de todos los pueblos. Hemos visto huelgas generales y grandes movilizaciones en toda Europa, en los Estados Unidos y ni que hablar de América latina, Asia (China es un hervidero) y África.

La tendencia es a que estas luchas se profundicen hasta voltear gobiernos y avanzar a un sistema más justo y equitativo, como podría ser el socialismo. Pero atención: Toda acción produce una reacción. Es posibles que el capitalismo arme sectores nazi-fascista con el fin de enfrentar y tratar de liquidar los reclamos y en general todas las luchas sociales y políticas.

Es una posibilidad muy cierta. Ya vemos como se mueven los Kirchner en la argentina, apoyándose en los sectores marginados para enfrentar a los trabajadores. Sabemos además del crecimiento de los grupos neonaziz en los Estados Unidos y otros lugares. La diferencia con los años 30 es que aquellos grupos de choque se apoyaban en un sistema capitalista todavía fuerte. La desgracia para ellos hoy en día, es la crisis creciente, la pelea interna entre sectores capitalistas, la descomposición del sistema y su tendencia a la disgregación.
Posiblemente tengamos que enfrentar grupos neonazis dispersos, y hasta enfrentados entre ellos, como pasa con las barras Bravas. En cambio la lucha del campo popular tiende a fortalecerse a extenderse y a unificarse. Y esa es la ventaja que nos hace ser optimistas sobre el resultado final.
Ovidio Pepe