Las próximas elecciones bajo las condiciones establecidas por la "Reforma Electoral" ha dejado algo muy en claro: que la nueva política de la que hablan no existe. La supuesta reforma confirma que la participación en elecciones es para unos pocos. ¿Pero quiénes son esos pocos que participan?
Por un lado los partidos prehistóricos, la UCR y el PJ, con suficiente aparato electoral acumulado en estos años como para mantenerse vigentes apesar de todas las penas que hicieron sufrir a los argentinos; ni hablar del Justicialismo, que conoce mejor que nadie como aplicar el clientelismo. Y el radicalismo que se dispersa por diferentes sectores y alianzas para intentar hacer olvidar que su estilo de gobierno no ha funcionado. Ahora surge una "gran camada" de políticos con energías renovadas, dinámicos, vivaces, y obviamente, con mucho dinero. Macri, De Narváez, Del Sel, Olmedo, y demás personajes que de la noche a la mañana dicen ser la esperanza de los necesitados. Seguramente, con una gran cuenta bancaria y con fama es un poco más fácil difundir en los medios ideas camufladas de progresistas.
Y el Kirchnerismo, que se muestra como el único camino viable a seguir, se basa en el personalismo del fallecido Néstor Kirchner (que ahora parece que fuera un santo) para ocultar lo que siempre fue: un sector que surgió del Justicialismo, que llegó al poder gracias a Duhalde, que estuvo en campaña con Solá, Ruckauf; que privatizó YPF junto a Menem; que usa de todas las maneras posibles los recursos del Estado para hacer propaganda (Sino pregúntenle a Mariotto y sus "casas compañeras" o a Grondona con "fútbol para todos"). Para ellos también es más fácil participar.
¿Quiénes quedan afuera? Los partidos chicos. Aquellos que son chicos, no porque la gente no pueda confiar en nosotros, no porque no tengamos proyectos, ideas, no porque no nos podamos organizar; sino que somos partidos chicos porque no tenemos recursos. Porque el sistema electoral está a la par del sistema monetario, y además de toda la burocracia que nos imponen, debemos cumplir con los gastos de fichas de afiliación, gastos de difusión, gastos administrativos, boletas electorales. Y hasta que el gobierno se acuerde de abonar esos gastos por participación electoral, mientras debemos rebuscarnos de mil maneras para poder conseguir dinero para esos gastos; porque sino nuestros compañeros de años y años de lucha no pueden ser parte de las elecciones. Esa es la libertad de expresión, la democracia participativa que tenemos. Todo ligado al dinero.
Raúl Castells- Candidato a Gobernador Santa Fe por MIJD lista 754
Antonia Martinez- Candidata a Gobernadora Chubut por MIJD lista 60
Tyson Fernández- Candidato a Gobernador Salta por MIJD lista 60
Por un lado los partidos prehistóricos, la UCR y el PJ, con suficiente aparato electoral acumulado en estos años como para mantenerse vigentes apesar de todas las penas que hicieron sufrir a los argentinos; ni hablar del Justicialismo, que conoce mejor que nadie como aplicar el clientelismo. Y el radicalismo que se dispersa por diferentes sectores y alianzas para intentar hacer olvidar que su estilo de gobierno no ha funcionado. Ahora surge una "gran camada" de políticos con energías renovadas, dinámicos, vivaces, y obviamente, con mucho dinero. Macri, De Narváez, Del Sel, Olmedo, y demás personajes que de la noche a la mañana dicen ser la esperanza de los necesitados. Seguramente, con una gran cuenta bancaria y con fama es un poco más fácil difundir en los medios ideas camufladas de progresistas.
Y el Kirchnerismo, que se muestra como el único camino viable a seguir, se basa en el personalismo del fallecido Néstor Kirchner (que ahora parece que fuera un santo) para ocultar lo que siempre fue: un sector que surgió del Justicialismo, que llegó al poder gracias a Duhalde, que estuvo en campaña con Solá, Ruckauf; que privatizó YPF junto a Menem; que usa de todas las maneras posibles los recursos del Estado para hacer propaganda (Sino pregúntenle a Mariotto y sus "casas compañeras" o a Grondona con "fútbol para todos"). Para ellos también es más fácil participar.
¿Quiénes quedan afuera? Los partidos chicos. Aquellos que son chicos, no porque la gente no pueda confiar en nosotros, no porque no tengamos proyectos, ideas, no porque no nos podamos organizar; sino que somos partidos chicos porque no tenemos recursos. Porque el sistema electoral está a la par del sistema monetario, y además de toda la burocracia que nos imponen, debemos cumplir con los gastos de fichas de afiliación, gastos de difusión, gastos administrativos, boletas electorales. Y hasta que el gobierno se acuerde de abonar esos gastos por participación electoral, mientras debemos rebuscarnos de mil maneras para poder conseguir dinero para esos gastos; porque sino nuestros compañeros de años y años de lucha no pueden ser parte de las elecciones. Esa es la libertad de expresión, la democracia participativa que tenemos. Todo ligado al dinero.
Raúl Castells- Candidato a Gobernador Santa Fe por MIJD lista 754
Antonia Martinez- Candidata a Gobernadora Chubut por MIJD lista 60
Tyson Fernández- Candidato a Gobernador Salta por MIJD lista 60
No hay comentarios:
Publicar un comentario