Que se vayan

¡Que se vayan todos!

Estas palabras se escuchaban durante el levantamiento popular del 2001. Y aunque no se fueron ningunos de los responsables de la crisis como son los políticos justicialistas, radicales, macristas, etc., en los últimos tiempos el ¡que se vayan todos! volvió a renacer con más fuerza en las luchas populares. Se cantaban en los cortes de rutas de los chacareros, se cantan en las movilizaciones obreras, en las marchas de los docentes, etc., pero ahora éste reclamo-exigencia se hizo masivo, cuando una multitud de diez mil personas salieron a reclamar ¡que se vayan todos!, ante el asesinato de un trabajador de la Empresa Andreani de Valentín Alsina, Daniel Capristo.

Está expresando la bronca creciente de la gente contra los funcionarios, la policía que trabaja con los ladrones y traficantes de droga, Contra el poder judicial mafioso y corrupto, y en fin contra todas las instituciones del Estado. Pero el blanco del odio popular en todo el País es el kirchnerismo y en Buenos Aires también el Gobierno de la Provincia, Daniel Scioli.

Esto es así, porque además de la inseguridad, está el crecimiento de la enfermedad de los pobres, como es el dengue, los despidos masivos de trabajadores, aumenta la desocupación y la pobreza, la caída del sistema de salud y educación, la falta de viviendas entre otras calamidades.

El MIJD viene reclamando ¡Que se vayan todos! desde siempre. Por eso acompañamos todas las luchas obreras y populares, que se producen y que ante el cansancio de aguantar al Gobierno kirchnerista, exigen que se retiren, que ya no lo quieren ver más.
¡Estamos asqueados de todos los políticos de las clases ricas, de los mafiosos, corruptos y asesinos!